viernes, 27 de enero de 2012

Ella.

La coincidencia, el destino o la suerte, no sé cual de todos esos factores ha sido el culpable de que me cruzara con ella, pero que si sé y tengo claro es que le estoy tremendamente agradecida por ello.
Segun dice la gente: " Somos humanos porque vivimos en sociedad, porque tenemos la necesidad de compartir momentos con alguien ".
Pues bien, por esa regla ella es una de las razones más importantes de que puede considerarme humana.
Desde que la he conocido he compartido innumerabes momentos con ella, todos y cada uno de ellas han sido unicos e ireemplazables, aunque solo hayan sido de pequeñitas, pero aun así, espero con ansia que seamos grandes amigas.

Conocerla, es lo mejor que puede pasarte, pero el cariño que le coges es tal, que luego ser independiente es imposible.

Mi vida entera.

Y por mucho que lo intento no puedo , no sé explicarte lo que significas para mi aunque siendo sincera creo que no hará falta que te lo diga. Querido hermano mayor , hoy es uno de esos días en los que te despiertas pensando en todo lo ocurrido hasta ahora , y es que por mucho que pase el tiempo aún no logro entender cómo consigues ser tan jodidamente único. Supongo que entenderás a la perfección que a estas alturas me quede sin cosas que decirte y es que hace tanto que las palabras se te quedan cortas... A tus veinte sigues removiendo cielo y tierra para conseguir verme sonreír y eso para mi no tiene precio. Atrapas mi tristeza para esconderla en tu bolsillo y apartarla de mi cada día , por eso y por mil cosas más creo que no hace falta que te diga lo que eso supone para mi. Te contaré un pequeño secreto y es que , te echaría de menos aunque no te conociera.
Felices veinte años. Espero poder seguir viéndote sonreír. Y una última cosita , te quiero , pero shhh , no se lo digas a nadie.

I love you.

Para un segundo, solo para dedicarme un minuto más. Porque quiero que veas, que te des cuenta de todo lo que te quise. Me flaquean las piernas solo con pensarlo, cuanto te quise, pero, ¿eso era querer? Ni siquiera estoy segura… Y aun así juraría que sentí por ti algo que no podría explicar con palabras. Pero es verdad, que ya solo queda un pequeño resto de todo lo que era, ese resto me empuja a escribir una vez mas hacia a ti. Porque hubo un día en el que pensé que solo tus risas podrían iluminar mi camino, y que equivocada estaba. Sin embargo, en aquel entonces solo tenia ojos para ti. Que irónico es pensar que gracias a dios conocí a alguien que te apartó de mis pensamientos. Y aunque ese alguien ya no es nadie, ahora se lo que de verdad es querer estar con una persona, siempre. Menos mal que acabé llegando a buen puerto…

Todo para mi.

Su problema es que no sabe mentir. Su corazón funciona de forma distinta al resto. Las emociones que la sacuden no se corresponden ni de casualidad con las que deberían ser. Cuando el amor la rodea, una fría indeferencia estremece sus huesos. Cuando los nervios machacan a las personas de su alrededor, una calma pasmosa se apodera de sus músculos. Cierto que de vez en cuando se contagia del mundo, y sufre indiferencias amorosas y calmas estresadas. Pero el amor sigue siendo un completo desconocido para ella. Y lo jodido es que lo busca con cada respiración, pero se le escapa igual que el aire exhalado. La realidad es que cualquier atisbo de sentimiento real le da tanto pánico que tarda meses en recuperarse del estremecimiento que le produce. Pero ella sigue en su línea masocamorosa, buscando un amor que consiga hacer temblar su alma.

Una calle de París.

Me gustaría poder decirte un par de chorradas, de esas que te hacen sentir bien. Y mirarte a los ojos hasta que mi cara de tonta te haga sonreír un poco, si quieres. Podríamos cambiar una tarde de domingo por otra de viernes. Por una tarde cualquiera con algo de sol.
Y dejar los malos ratos escondidos debajo de la cama, ya sabes.
También podríamos buscarnos en las estrellas, o prometernos ver juntos cada constelación sentados bajo un banco de Central Park.
Y besarnos mientras la luna nos espía en alguna calle de París.